ENERGÍA LIBRE EN MÉXICO

Imagina que tu proveedor de energía te pague si cambias tus horarios de consumo. Piensa que tu proveedor te cobra más del doble de lo que realmente cuesta, y tú no lo sabes. Nadie te lo explica, simplemente porque no les conviene que lo sepas.
Quiero explicarte la verdad que desconoces y que debes saber. La tarifa de electricidad es la suma de seis productos, algunos cambian cada hora y otros tienen un precio fijo determinado por la CRE y CENACE de forma pública. Estos productos son los siguientes:
COSTOS PROMEDIO 2023:
  • Energía $ 0.903 por kwh: Es el precio/costo por producir la energía, considerando 24 horas los 365 días del año 2023 en todo el país (SIN).
  • Potencia $ 0.5354 por kwh: Es el precio que refleja la capacidad o potencia necesaria para producir la energía que se consume. El precio es público y cambia cada año, siendo su valor anunciado la última semana de febrero. Este costo es el mismo para todos los usuario.
  • Servicios conexos $ 0.006 por kwh: Son los costos del sistema por brindar el servicio público de energía.
  • Operación del CENACE $ 0.006 por kwh: El Centro Nacional de Control de la Energía es el organismo responsable de garantizar la seguridad del sistema, ordena a todos los generadores cuándo y cuánto pueden producir y por ese motivo todos le pagamos por operar el sistema.
  • Transmisión $ 0.07727, $ 0.1759,$ 0.1759 por kwh: Es el servicio público encargado de transportar la energía de alta tensión a lo largo de distancias tanto grandes como pequeñas, equiparable a las autopistas. Su precio está regulado por el gobierno y varía según la tensión del usuario.
  • Distribución $ 0.000; $ 0.1662 por kwh: También es un servicio público. Y si la transmisión es equiparable a una autopista, la distribución sería equiparable a las “calles”, envía la electricidad a menor tensión. Su precio está regulado por el gobierno.                                                      
Todos los costos utilizados para la fórmula son reales y, lo más importante, son públicos. Sin embargo, nunca nos enseñaron a entender cómo llega y cómo se cobra la luz. En general, poca gente sabe cómo leer su recibo y dónde encontrar la información pública sobre los valores reales, sin que estos sean maquillados por los proveedores de electricidad.
Para disminuir la corrupción y tener un mercado más abierto, se han realizado estudios y pruebas que evidencian cómo la compra en línea beneficia al mercado, a los usuarios y a la legalidad. De esta manera, el e-procurement (transacción digital) se convierte en un factor determinante para los mercados disruptivos.

Según un artículo publicado por la Universidad de Cambridge:

La transparencia de un sistema de transacción digital en línea y la huella digital de un sistema bien diseñado pueden incluso alertar a las autoridades sobre señales de corrupción, colusión u otros actos ilícitos.
Hechos clave:
  • Durante los primeros meses de la pandemia de COVID-19, los países con sistemas de transacción digital ajustaron sus procedimientos a los confinamientos y otras nuevas variables en la mitad del tiempo que les tomó a los países con sistemas de contratación no electrónicos.
  • Cuando Corea del Sur adoptó un sistema en línea, el tiempo promedio que le tomaba al gobierno seleccionar una oferta ganadora después de recibir las propuestas de las empresas se redujo de 30 horas a solo 2 horas.
  • En Argentina, la duración se redujo en más de 11 días después de que el país cambió a la transacción digital .
Hay evidencia de que la digitalización de las transacciones puede significar una mejor supervisión y una mejora en la prestación de servicios. La calidad probablemente mejora en parte porque el cambio a un sistema de contratación en línea aumenta la competencia. En los sistemas no electrónicos, los posibles oferentes tienen que buscar licitaciones en periódicos basados en papel, lo cual es costoso y consume mucho tiempo, especialmente para las empresas más pequeñas. Es mucho más fácil y barato postularse a través de un sistema en línea, lo que lleva a más postulantes.
Al cambiar a la transacción digital, la tasa de contratos adjudicados que solo recibieron una oferta se redujo casi a la mitad, del 33% al 17%. En el estado de Karnataka en India, el número de proveedores aumentó de 130 a 4800 en los primeros tres años de operación de su sistema de transacción digital; en Corea del Sur, el número de oferentes se duplicó de 70,000 a 147,000 en sus primeros tres años.
Un sistema de transacción digital también tiende a atraer más ofertas de empresas más pequeñas. Un análisis de los datos abiertos de las reformas en Ucrania muestra que un notable 97.7% de las empresas que licitan en su sistema de transacción digital son pequeñas y medianas empresas. En 2021, unas 64,801 pequeñas o medianas empresas ganaron contratos por un valor colectivo de $16.6 billones, mientras que 1524 grandes empresas ganaron contratos por un valor de $5.9 billones.
No solo es más fácil para las empresas licitar, sino que los gobiernos también gastan menos en publicitar contratos (y fuerzas de ventas). Cuando Filipinas cambió a la transacción digital, gastó un 50% menos en costos de publicidad en periódicos después del cambio, ahorrando $9 millones anuales.
Quizás lo más importante es que los estudios han documentado repetidamente que la transacción digital y la competencia resultante significan precios más bajos. La digitalización del proceso reduce los costos de licitación y transacción para las empresas, atrayendo así a más empresas al mercado, lo que estimula la competencia y generalmente significa precios más bajos. El estudio se llevó a cabo analizando 11 países en la base de datos global de contratación pública del Banco Mundial que han cambiado a la transacción digital.
Bajo la transacción digital, todo el proceso de contratación pública se registraría y sería visible en línea. Para hacerlo transparente en línea, se incluye la planificación, la distribución de documentos de licitación, la toma de preguntas de posibles proveedores, la verificación de candidatos, la supervisión de la presentación y evaluación de ofertas, la adjudicación de contratos y el pago.

¿Cuánto podrías haber ahorrado si tu tarifa no estuviera maquillada?

La tarifa promedio de la CFE durante el 2023 fue la siguiente: Dist, 1.87, Dit, 1.73, y GDMTH 2.35. Estas tarifas son públicas. Si tienes otro proveedor de energía, debes comparar el precio total que te cobraron y dividirlo entre el total de kWh (kilo watts hora) consumidos.
Al estructurar la tarifa con costos públicos, se utilizaron los promedios del SIN (Sistema Interconectado Nacional) y el promedio de los 12 meses, convirtiendo algunos valores fijos en valores referenciados a todas las horas del año. De esta manera, obtenemos un promedio generalizado. Algunas zonas del país tienen costos más bajos que otras, por lo que una tarifa utilizando los precios públicos en las zonas con costos más bajos puede disminuir aún más el precio por kWh de referencia con los costos públicos.
Los precios de energía y potencia son dinámicos, lo que significa que cambian de acuerdo con los precios de todas las centrales eléctricas que inyectaron electricidad en el sistema durante todas las horas del año, así como con la disponibilidad y la demanda. Este dato es muy importante, ya que son dos costos que se pueden fijar en lugar de estar expuestos a los cambios dinámicos. Para que los precios sean fijos, solo es necesario celebrar un contrato con uno o varios generadores por un determinado período (a acordar entre las partes), aunque aquí pueden surgir dos complicaciones:
  • La primera complicación es saber con quién establecer el contrato. No existe una lista amarilla (accesible) con los contactos de las centrales eléctricas. Además, si decides dirigirte directamente a una central eléctrica, debes saber que en ese lugar no se encargan de vender la energía; allí solo la producen, y es posible que toda la energía ya esté comprometida, sin disponibilidad para la venta.
  • La segunda complicación consiste en determinar si la energía disponible nos es útil. Para ello, es necesario entender cómo funciona el mercado energético. La energía más cercana no es necesariamente la que más te conviene; a diferencia de lo que podría parecer obvio o lógico, la proximidad no es el factor que determina un beneficio económico. Primero, debes comparar la cantidad de energía disponible con la cantidad de energía que consumes. Además, debes verificar que las horas en las que consumes energía coincidan o sean similares a las horas de producción de la central. Es comparable a tener agua disponible cuando te quieres bañar; de nada sirve tener agua en horarios en los que no la vas a utilizar. Luego, entra en juego el factor del precio. Los costos y precios son dinámicos y cambian cada hora, todos los días del año. Existen más de 2400 nodos (zonas de cobro) distintos. Aunque CENACE publica esta información diariamente, la mayoría de la gente no sabe cómo ni dónde buscarla. En caso de encontrarla, sería muy complicado entenderla, ya que se presenta en bases de datos con miles de registros, sin estar procesada para que podamos interpretarla fácil y rápidamente. Por esta razón, es fácil manipular la información para que no sepas cuánto extra se te está cobrando.
El mismo problema que tienes tú lo enfrenta el generador. Un productor de energía no quiere venderle a un intermediario; desea venderle directamente a un consumidor. El generador ha realizado inversiones de cientos de millones de dólares y quiere asegurar que el consumidor le pague, sin correr el riesgo de que un intermediario no le pague o le pague tarde.
Si hay un vínculo directo entre el consumidor y el generador, van a suceder varias cosas: los precios se volverán más justos para ambos. El consumidor pagará menos, el generador ganará un poco más y todo será más transparente, sin necesidad de que un intermediario "jinetee" los pagos, sin sobrecostos y, sobre todo, más seguro para aquellos que realmente están comprometidos porque lo necesitan: el consumidor para sus actividades diarias y el generador, la garantía de hablar y recibir el pago directamente del consumidor.
Lo único que falta para que esta utopía eléctrica se convierta en realidad es un lugar donde los consumidores y los generadores puedan publicar sus necesidades y ofertas para tener un trato lo más directo posible. Algo así como una sección amarilla o un Google de la energía que les permita encontrarse a todos y que además tenga toda la información de precios y costos actualizados en tiempo real y fácilmente comprensibles. De esta manera, podrían realizar sus propios análisis, buscar lo que más les convenga y contratar al instante conociendo el famoso "credit rating" de la contraparte, de manera clara y transparente. De esta forma, se pondría fin a las tarifas maquilladas y los responsables tendrían el poder de decidir sin necesidad de consultores e intermediarios. Es obvio que esto no le va a gustar a muchos que ganan maquillando tarifas, pero así es como se cambia el mundo.